En el ecosistema startup, donde la incertidumbre y el cambio constante son la norma, contar con una brújula que guíe las decisiones estratégicas es fundamental. Sin embargo, existe una métrica que destaca por su importancia estratégica: la North Star Metric (NSM).
¿Qué es la North Star Metric?
La North Star Metric es una métrica única que refleja el valor central que tu startup ofrece a sus clientes. A diferencia de otros indicadores que pueden centrarse en resultados financieros o en la eficiencia operativa, la NSM se enfoca en el impacto que tiene tu producto o servicio en la experiencia del cliente. Es, en esencia, la medida del éxito en términos de la promesa de valor que le haces a tu audiencia.
El objetivo de la NSM es darle claridad y dirección al equipo de las decisiones que toman con la finalidad de crecer a largo plazo. Cuando surgen dudas de hacia dónde ir, qué hacer, en qué invertir, siempre puedes preguntarte, ¿cómo afecta esta decisión al NSM?
Como su nombre lo dice, el NSM es la “estrella del norte” que guía la operación del negocio. Tener una buena NSM es importante porque si tu compañía está creando y entregando más valor al cliente final, entonces puedes validar que estás yendo en el camino correcto.
Los usuarios fidelizados, impactan positivamente en la retención, por lo que en el largo plazo aumenta el crecimiento de la compañía, y serán estos mismos usuarios quienes te refieran a nuevos clientes.
El reto está realmente en identificar cómo medir este valor a través de una sola métrica. Un error común es definir el revenue o los ingresos de la compañía como la NSM. Si bien, en algunos casos sí se puede aplicar, por lo general el revenue no es una NSM tan buena porque solamente describe el precio que los clientes pagan, pero no el valor creado hacia el usuario
Por el otro lado hay que tener en cuenta, que si la NSM está creciendo pero el revenue no, entonces definimos una NSM incorrecta porque estamos sumando valor, pero no estamos generando una empresa con un modelo que sea sostenible en el tiempo.
North Star Metric vs. KPIs y BHAG
Es común confundir la NSM con otros términos de gestión como los KPIs (Indicadores Clave de Rendimiento) y los BHAG (Big Hairy Audacious Goals, o Grandes y Audaces Metas). Aunque todos estos conceptos son importantes, es crucial entender sus diferencias.
Los KPIs son métricas específicas que te ayudan a monitorear el rendimiento en diversas áreas de tu negocio. Pueden incluir métricas financieras, de marketing, de operación, etc. Aunque son útiles para evaluar el rendimiento en distintas dimensiones, los KPIs no necesariamente capturan el valor central que estás entregando a los clientes.
Por otro lado, los BHAG son metas ambiciosas a largo plazo que inspiran y motivan a todo el equipo. Sin embargo, a diferencia de la NSM, los BHAG son más aspiracionales y no necesariamente se centran en una métrica específica que refleje el éxito actual de la startup.
Define la North Star Metric para tu Startup
Definir tu North Star Metric requiere un entendimiento profundo del valor que tu producto o servicio aporta a los usuarios. Aquí algunos pasos para ayudarte a definirla:
– Identifica tu propuesta de valor principal: Reflexiona sobre qué es lo que hace que tu producto sea valioso para los usuarios. ¿Qué problema resuelve o qué necesidad satisface?
– Define el comportamiento clave del usuario: Piensa en cómo los usuarios interactúan con tu producto y qué acciones indican que están obteniendo valor. ¿Es la frecuencia de uso? ¿El nivel de interacción?
– Elige una métrica sencilla y medible: La NSM debe ser fácil de entender y de medir. No debe ser un compuesto de muchas métricas, sino una única métrica que encapsule el valor central.
– Alinea a tu equipo: Asegúrate de que todos en la startup comprendan y se comprometan con la NSM. Esto garantiza que todos los esfuerzos estén dirigidos hacia la misma meta.
Una vez definida tu NSM, es crucial integrarla en la cultura y operaciones de tu startup:
– Comunícala claramente a todo tu equipo y asegúrate de que entiendan su importancia.
– Establece metas relacionadas con tu NSM y realiza un seguimiento regular.
– Alinea tus KPIs secundarios para que apoyen y alimenten tu NSM.
– Utiliza la NSM como criterio principal en la toma de decisiones estratégicas.
– Revisa periódicamente la relevancia de tu NSM y ajústala si es necesario conforme tu startup evoluciona.
Al decir que la North Star Metric es el indicador más importante puede sonar como algo complejo o puede llegar a asustar a algunos founders en etapa temprana. Nuestro consejo es que tu NSM sea algo sencillo, fácil de comunicar, fácil de medir y que tenga relación con el crecimiento de la compañía y con el valor que estás entregando al usuario.
Si logras encontrar ese indicador que efectivamente demuestra si estás sumando valor o no, podrás identificar esos elementos a desarrollar que harán que tus usuarios sean recurrentes, estén fidelizados y te traigan a más usuarios. Eso es lo que nos traerá crecimiento en el tiempo.
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