Fabián Gómez es ingeniero industrial de Barranquilla, Colombia. Creció viendo a su papá sembrar limón, mango y papaya en la región de Usiacurí. Presenció los problemas del campo y los obstáculos de los agricultores para vender sus cultivos.
Su paso por Rappi despertó su pasión por la tecnología. Donde formó parte del equipo para abrir las primeras operaciones por fuera de Bogotá y luego ocuparse de las de México, Argentina, Uruguay y Brasil.
Sin embargo, en paralelo, el emprendedor observaba a su papá vender un kilo de limones a cifras ínfimas en la finca y que el mismo día, esos mismos limones, un restaurante los compraba a tres veces su precio como mínimo.
Fue así como decidió dar por cumplido su ciclo en Rappi y creó Frubana, la prometedora agrotech colombiana que combina tecnología y agro. Pero no lo hizo solo, para esto reunió a sus socios Miguel Silva, experto en tecnología, y Alex Burrowes, encargado de desarrollo de producto.
La plataforma que conecta a restaurantes directamente con productores con casi un año de haber sido creada, pero ingresó a la prestigiosa aceleradora Y Combinator y genera más de 100 empleos.
Cuenta con una logística inteligente que se apalanca de la tecnología para conocer las rutas más rentables para transportar frutas y verduras.
“La tecnología nos permite escalar, y la escala trae eficiencias. Específicamente construimos tecnología de predicción, ruteo, operaciones y compras”, relata Gómez.
La startup ha logrado reunir más US$ 12M en dos rondas. La primera fue una pre-seed por US$ 2M liderada por Y Combinator, el renombrado programa de aceleración estadounidense, Monashees, Kairos y GE32 Capital. La segunda ronda fue mayor, de US$ 10M a través de Kairos.
Además de Bogotá, están en Barranquilla, crecen a un ritmo de 50% mensualmente y atienden en ambas ciudades a más de 1.000 clientes activos.
Frubana proyecta hacer US$ 6M de ventas al año en Colombia y, recientemente desembarcado en México, ahora se prepara para estar pronto Brasil.
